Un poco de ácida realidad

Claro que la relidad no se elude.A veces algunos tenemos que lidiar con nosotros mismos y con nuestro entorno familiar,que lo que sucede en la realidad nos aflige,pero estamos tan maltrechos que no podemos comentar sus sucesos trágicos,penosos , desilusionantes.Si no se puede comentar el dolor o la rabia de uno, es díficil comentar los hechos dolorosos y frustrantes de la realidad.

Me apena lo del avion,la pérdida irreparable de las personas que murieron en esa tragedia aerea.

Cada vez es decepcionante andar por las calles de Lima que es un poco el Perú (por no decir ciudad centralista).

El país politicamente está muy decepcionante.Los hermanos de Toledo (y él mismo) hacen lo que quieren.Esa reunión del primer ministro PPK con Alan me parece cómico,como si los partidos políticos representaran el reclamo de todos nosotros.
Hablar del país _políticamente_ es hablar de dolor,desilusión,desencanto.Pero no hay que perder las esperanzas,he aprendido que el pesismismo no es del todo malo,que por ahí siempre arde un sentimiento de esperanza.Hay que poner por lo menos un poco de música alegre,para tener animos de seguir viviendo y de seguir sufriendo pero con ánimos de nunca sentirnos completamente derrumbados, de nunca tener esas ganas determinantes de apagar la luz para siempre.